No podemos cambiar la historia pero sí imaginar cómo sería mucho mejor. Y casualmente, esa mejoría pasa siempre por la terreta. A continuación, cinco acontecimientos y descubrimientos históricos que hubieran sido mucho mejor si hubiesen sucedido por estos lares.

  1. Invención de la Coca-Cola. El 8 de mayo de 1886 un farmacéutico de Atlanta, Estados Unidos, llamado John S. Pemberton creó un jarabe contra los problemas de digestión que se convertiría en el refresco más famoso del mundo. Todos conocemos su sabor, su famosas campañas de publicidad, las cifras millonarias que cosecha pero… ¿y si el descubrimiento de la fórmula hubiera ocurrido en Valencia? ¿en su composición aparecería la chufa? ¿tendría otro color? ¿combinaría dulce y salado? Espera, no elucubremos más, que los lugareños de Aielo de Malferit tienen otra versión…
  2. Lanzamiento del Apolo 11. Cabo Cañaveral versus Cabo de San Antonio. No hay discusión posible, no hay nada que explicar. El 100% de los astronautas entrevistados prefiere pasar sus últimas horas antes del despegue disfrutando de las bondades de la Marina Alta, que por algo tienen un alto coeficiente intelectual.
  3. Creación de ARPANET. El Internet primitivo conectaba en red una serie de computadoras de varias universidades de la costa oeste de Estados Unidos. Suponemos que en los mensajes de prueba se preguntarían sobre el horario de las clases, las fechas de exámen, qué había en el menú del día de la cantina de la facultad de ciencias aplicadas y otras cosas sin importancia propias de la vida del campus. Aquí también nos hubiera venido de lujo para saber si venía la riuà y quién iba a ser el pirotécnico de la primera mascletà del año.
  4. Primer tren bala. A mediados de los años 50 los japoneses se pusieron serios con el tema de los trenes de alta velocidad y consiguieron unir las principales ciudades del país gracias a los casi 300 km por hora que alcanzan sus ferrocarriles. Pero el avance tecnológico nos parece nimio. Desde aquí les proponemos un verdadero reto: conseguir salvar la distancia entre València Nord y Almassora en menos de una hora y diez minutos de tren.
  5. Entrega de los primeros premios Nobel. En 1901 la Real Academia Sueca de Ciencias entregaba los primeros galardones a grandes genios de la Literatura, Química, Medicina y compañía. Las ceremonias siempre han estado a la altura de sus homenajeados, pero sería mucho mejor si la recepción tuviera lugar en esa maravillosa localidad de la Ribera Baja llamada Sueca. ¿Quién quiere comer arenques ahumados y albóndigas pudiendo comer paella?